27 de octubre de 2009

¿(Por) Qué leer si estás embarazada?




Por Ileana Medina Hernández


Siguiendo el hilo de la bloguera amiga Ahora la madre soy yo, sobre aquellas cosas que nos hubieran gustado saber antes de parir, podemos hacer una lista de aquellas lecturas imprescindibles que nos han ayudado a confirmar que nuestros instintos maternales -tan distintos de lo que la sociedad "dice" que hay que hacer con los niños- son parte de la ley de la naturaleza para conservar la especie, y su satisfacción es fundamental para criar niños sanos y felices.

Seguro que las mujeres de la pintura de arriba no necesitan leer ningún libro para reencontrarse con su femineidad y sus deseos maternantes (según Casilda Rodrigáñez, lo apropiado es decir "deseo maternal", no instinto maternal).

Pero las madres occidentales nos encontramos con entornos enormemente hostiles a la maternidad, a la crianza en brazos o a la lactancia materna prolongada (o sea, a la lactancia no interrumpida precocísimamente por el uso de biberones), que ponen en duda y en entredicho aquellos pocos deseos profundos con los que aún podamos estar en contacto.

Además, las mujeres "modernas" hemos construido nuestra identidad en la vida social externa o laboral, lo cual ha traído como "daño colateral" que nos hayamos alejado progresivamente de las pulsiones de nuestro cuerpo, y esto (notable por ejemplo en los dolores menstruales o en los crecientes problemas de fertilidad) toma su consecuencia más grave cuando devenimos madres, y nuestra desconexión no solo nos afecta a nosotras, si no, lo que es peor, a nuestros bebés, cuyas expectativas al nacer - simplemente leche y cuerpo maternos- siguen siendo las mismas que se fraguaron en las selvas africanas hace millones de años.

Leo con pasmo cada día articulos de importantes revistas científicas o investigaciones de ilustres universidades y hospitales que prentenden demostrar que los niños "necesitan contacto físico y atención", o que "las madres mecen a sus hijos, les cantan, y esto fomenta enormemente su desarrollo neurológico". ¡¡¡Que haya que dedicar recursos y esfuerzos científicos a demostrar estas obviedades!!! Que encima haya que mendigar o luchar con uñas y dientes por nuestro derecho a estar con nuestros bebés, como si fuera una conquista que tuviéramos que merecer en el siglo XXII. Como dice insuperablemente mi amiga Caro: "así de ignorantes y de idiotas nos hemos vuelto, en apenas 100 años".


Por eso, nos vemos impelidas a buscar lecturas que nos refuercen que nuestros instintos, nuestro deseo de estar en contacto permanente con nuestros bebés, nuestra soledad y angustia cuando nos los arrebatan en el hospital, nuestra tristeza cuando tenemos que incorporarnos al trabajo tras las míseras 16 semanas de baja remunerada, nuestras ganas de consolarlos cada vez que lloran, no sólo son normales y sanos, sino que son el resultado de millones de años de evolución en que las madres hemos sido diseñadas por la evolución para acudir a atender a nuestras crías cada vez que ellas lo necesiten, porque si no, sencillamente la especie desaparece.
 
En 100 años las madres podemos habernos vuelto trabajadoras, competitivas, intelectuales, ambiciosas... podemos habernos alejado más o menos de nuestros deseos maternantes... pero los bebés siguen siendo los mismos, sus necesidades fisiólogicas y emocionales no han cambiado, y resulta que la neurología y las distintas ramas de la ciencia lo demuestran todos los días: los bebés necesitan el contacto con el cuerpo de sus progenitores, la leche materna y la atención constante a sus necesidades, para su correcto desarrollo neurológico, su desarrollo inmunitario, su maduración emocional e incluso su crecimiento físico.
 
Las mujeres embarazadas creemos que todo va a salir espontáneamente como debería ser, y luego nos encontramos con que tuvimos la "mala suerte" de una cesárea, o de que "no tenemos leche", pero en la mayoría de los casos no es cuestión de "suerte".

Es cuestión de que nuestro entorno -sobre todo el entorno hospitalario que tan malas prácticas sigue llevando a cabo- y nosotras mismas luchemos por hacer las cosas bien. Para ello, desgraciadamente, tenemos que estar, como mínimo, informadas.
 
Lecturas recomendadas desde Tenemos Tetas para todas las mujeres y hombres que están esperando un hijo:
 

  • Fernández del Castillo, Isabel: LA REVOLUCIÓN DEL NACIMIENTO, Belacqua, 2008.


  • González, Carlos: BESAME MUCHO: COMO CRIAR A TUS HIJOS CON AMOR, Editorial Temas de Hoy, 2003.


  • González, Carlos: UN REGALO PARA TODA LA VIDA: GUIA DE LA LACTANCIA MATERNA, Editorial Temas de Hoy, 2006.


  • González, Carlos: MI NIÑO NO ME COME, Editorial Temas de Hoy, 2006.


  • Gutman, Laura: PUERPERIOS Y OTRAS EXPLORACIONES DEL ALMA FEMENINA, RBA LIBROS, SA, 2006.


  • Gutman, Laura: LA MATERNIDAD Y EL ENCUENTRO CON LA PROPIA SOMBRA, RBA LIBROS, SA, 2007.


  • Gutman, Laura: CRIANZA: VIOLENCIAS INVISIBLES Y ADICCIONES, RBA LIBROS, SA, 2007.


  • Gutman, Laura: LA REVOLUCION DE LAS MADRES: EL DESAFIO DE NUTRIR A NUESTROS HIJOS. RBA LIBROS, S.A., 2009.


  • Henci, Goer: GUÍA DE LA MUJER CONSCIENTE PARA UN PARTO MEJOR, Editorial Ob Stare, 2008.


  • Jové, Rosa: DORMIR SIN LAGRIMAS: DEJARLE LLORAR NO ES LA SOLUCION: TODO LO QUE HAY QUE SABER PARA RESOLVER LOS PROBLEMAS DEL SUEÑO INFANTIL. Editorial La Esfera de los Libros, 2006.


  • Jové, Rosa: LA CRIANZA FELIZ, Editorial La Esfera de los Libros, 2009.


  • La Liga de la Leche Internacional: EL ARTE FEMENINO DE AMAMANTAR, Pax Mexico, 2001.


  • Liedloff, Jean: EL CONCEPTO DE CONTINUUM, Editorial Obstare, 3era edición, 2008.


  • Miller, Alice: EL DRAMA DEL NIÑO DOTADO Y LA BÚSQUEDA DEL VERDADERO YO, Tusquets Editores, 1998.


  • Odent, Michael: EL BEBÉ ES UN MAMÍFERO, Editorial Obstare, 2da. edición revisada y ampliada, 2008.


  • Odent, Michel: LA CIENTIFICACIÓN DEL AMOR, Fundación Creavida.


  • Pinkola Estés, Clarissa: MUJERES QUE CORREN CON LOS LOBOS, Zeta Bolsillo, 2009.


  • Rodrígañez, Casilda: LA REPRESIÓN DEL DESEO MATERNO Y LA GENÉSIS DE LA SUMISIÓN INCONSCIENTE, Ediciones Crimentales, 2008.

Advertencia: Estos son libros que crean adicción. Cuando empiezas a tirar del hilo, te das cuenta de hasta qué punto el mundo está al revés, y de cuánta verdad hay encerrada en cada una de estas páginas, y no puedes parar de seguir investigando... sobre todo dentro de ti.

11 comentarios:

  1. No puedo más que leer el post y sonreírme. Millones invertidos en estudios científicos para demostrar lo que ya sabíamos!
    Thomas Verny en su libro “El futuro bebé” escribe: “Hoy tenemos conocimiento de algo que todos intuíamos: que es imposible separar la mente del cuerpo, la naturaleza de la crianza. Todo proceso biológico deja una huella psicológica, y todo hecho psicológico modifica la arquitectura del cerebro”, pocos párrafos más adelante continua: “He escrito El futuro bebé para superar las polaridades, para establecer conexiones entre las cuestionables ideas del pasado y las verdades alumbradas por la ciencia, entre la influencia de la experiencia y la de los genes. Pretendo describir la interrelación entre la psicología (la manera en que un padre mantiene a su hijo) y la biología (qué sucede en el cerebro y el cuerpo del bebé).
    Hace sólo diez años habría pensado que todo esto eran conjeturas. Hoy, avalado por cientos de hallazgos muy serios y contrastables realizados en las universidades y laboratorios más avanzados del mundo, las respuestas son inequívocas y están a punto de cambiar nuestra manera de criar y enseñar a los niños… ”
    El lo intuía, pero no le alcanzaba…porque no??? Intuición :polo femenino, conocimiento científico: polo masculino, yin y yang. Si se piensa en todo lo que tiene que ver con el polo femenino(o yin) veremos que para el mundo de occidente no es válido o esta fuertemente desacreditado.
    Y no estoy para nada contra los estudios científicos que han permitido corroborar lo que ya sabíamos de manera intuitiva (si es lo que permite a muchos creerlo), siempre y cuando, también avalen que esto demuestra que la intuición, instinto, ambas, o como quieran llamarle, también es una fuente válida de conocimiento, e incluso más rápida, económica, saludable y accesible a todos!!
    En relación a los libros - de los que recomiendas y he leído -todos me parecen excelentes, y también los recomendaría, siempre y cuando no nos olvidemos que lo más importante es re-descubrir nuestra propia guía intuitiva, que requiere de un poco de silencio interior para que la podamos escuchar. Mi convicción también es que la mejor guía en la crianza de nuestros hijos es nuestra propia intuición (instinto maternal, deseo maternal o como a cada uno le guste llamarlo) y algunos libros nos dan la oportunidad de validar esto que intuimos o sentimos como correcto para nosotros y nuestros hijos, algo que lamentablemente necesitamos para sentirnos más seguros en un camino tan poco transitado hoy en día.
    La mamá(o el papá también porque no) que se anime a seguir su corazón no necesita de ningún libro, pero si no esta muy segura, o se siente bombardeada por las opiniones ajenas, bienvenidos sean los libros como fuente de información que nos permitan sacar nuestras propias conclusiones! Lo mas probable es que, como bien explicas, por múltiples razones que bien describís, no podamos escuchar nuestra sabiduría innata en relación a estos temas y necesitemos informarnos mucho primero, para que, con mucho esfuerzo- en algún momento- podamos seguir nuestro genuino y propio camino sin necesidad de consultar libros para algo que a todos nos debería nacer con mucha facilidad!!

    Me despido Ileana dejándote un cálido abrazo!
    María

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  2. María!!! Muchísimas gracias por este comentario que es mejor que el post mismo!!! Muchas gracias de verdad, tu análisis es muy bueno, no podría estar más de acuerdo.

    A mí me pasa como a Verny, jeje, que he sido muy "intelectual", quizás por eso he necesitado los libros para corroborar mis instintos y también para paliar mis inseguridades,

    Esta idea me parece fundamental: "Todo proceso biológico deja una huella psicológica, y todo hecho psicológico modifica la arquitectura del cerebro”. Ahora veo claramente esa correspondencia entre cuerpo y alma, y precisamente tengo por ahí un borrador de post sobre esto, al que le tengo que meter mano.

    Muchas gracias y otro cálido abrazo grandote para ti, querida amiga!!!

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  3. La verdad Ileana que me enfrasque tanto con el tema que al comentario, antes de publicarlo, incluso le saque partes para hacerlo más breve, pero igual me quedo medio largito, es que coincidieron dos cosas: tus posts que siempre me inspiran y el libro de Verny que justo tenía fresquito en mi mente y aún dando vueltas en el escritorio!
    Gracias a ti y espero con ansias que ese borrador vea la luz y todos podamos disfrutarlo!!!
    un beso grande!!!
    María
    Pd: Muchos de estos libros fueron para mi, en un momento de mi vida, una fuente de alivio(validaron lo que sentía y hacia)y de sostén(intelectual para defender mis emociones y acciones y poder mantenerlas ante la mirada y desaprobación del otro)

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  4. Yo también lo he comentado alguna vez en alguno de mis posts, si hacen falta demostraciones científicas para confirmar lo que ya sabemos en nuestro fuero interior y convencer a los demás, pues bienvenidas sean. Yo siempre me digo que este será el último libro, pero la cuestión es que más tarde descubro otro y es inevitable comprarlo y leerlo.

    Un abrazo, me encanta tu blog.

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  5. "En 100 años las madres podemos habernos vuelto trabajadoras, competitivas, intelectuales, ambiciosas... podemos habernos alejado más o menos de nuestros deseos maternantes... pero los bebés siguen siendo los mismos, sus necesidades fisiólogicas y emocionales no han cambiado, y resulta que la neurología y las distintas ramas de la ciencia lo demuestran todos los días: los bebés necesitan el contacto con el cuerpo de sus progenitores, la leche materna y la atención constante a sus necesidades, para su correcto desarrollo neurológico, su desarrollo inmunitario, su maduración emocional e incluso su crecimiento físico. "

    ¿Sabes qué me planteo? Que como todo en la vida, TODO es necesario. Equivocarse también. La mujer necesitaba explorar los espacios fuera del hogar porque se estaba ahogando. Y explorar para crecer es bueno. Lo que no es tan bueno es marcharte a explorar y empezar a maldecir el hogar como si fuera la fuente de tus desdichas.(la fuente de nuestras desdichas es otra). Porque lo más importante en general para la humanidad está DENTRO del hogar, para hombres y mujeres. Unos lo tienen, y los que no lo tienen, lo desean. Aunque juren y perjuren que no. 'Ningún hombre es una isla'. Y ahora nos empezamos a dar cuenta, después de tanta tierra conquistada fuera, que se nos apaga el fuego de la chimenea en la casa. Qué lección habremos de sacar de esto? cada una la suya, por supuesto...

    Se me va la olla, Ile...

    Respecto de los libros, comparto la opinión de que a lo mejor, demasiada lectura puede ofuscar un instinto libre y claro (aunque los instintos libres y claros me parecen difíciles de ofuscar...). Pero una inmensa mayoría, y especialmente de primeriz@s, bombardeados por opinólogos de toda clase, creo que agradece encontrarse POR ESCRITO CON LO QUE SU INSTINTO LE DICE. Y de no primeriz@s confusos y apenados por sentir que no han hecho lo que querían la primera vez. Así le recuerda 'eh, mira, esto es lo que yo siento y no sé explicar...'. Necesitamos que una figura de 'autoridad' refrende nuestro instinto para defenderlo ante tanto opinólogo...

    Me apunto los que me faltan por leer de la lista ;)

    Un beso enorme

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  6. Caro, yo creo que el hecho de que la mujer se haya incorporado al mundo público y laboral ERA NO SOLO INEVITABLE, SINO NECESARIO E INMENSAMENTE POSITIVO, PARA LAS MUJERES Y PARA LA SOCIEDAD EN SU CONJUNTO.

    Creo que lo he dicho en otros posts, y también tengo otro borrador por ahí sobre crianza con apego y feminismo pendiente de terminar (tengo muchos artículos en borradores, sin tiempo para meterme en ellos a fondo como quisiera) PERO LA INCORPORACIÓN DE LA MUJER AL TRABAJO ES MARAVILLOSA, NECESARIA Y POSITIVA, Y UN PASO IMPRESCINDIBLE HACIA EL VERDADERO EQUILIBRIO DE LA SOCIEDAD.

    Yo misma soy trabajadora desde los 22 años, y no he renunciado a mi trabajo ni siquiera al ser madre.

    Pero EL SIGUIENTE PASO tiene que ser que todos, mujeres y hombres, trabajemos MENOS, y podamos disfrutar -remuneradamente y sin riesgo de perder nuestro empleo- de los permisos necesarios y suficientes cuando nazcan nuestros hijos, y de jornadas laborales humanas que nos permitan estar más tiempo con nuestra familia.

    Ahí es donde está, pienso, el camino hacia una sociedad más equilibrada y justa.

    Un abrazo y muchas gracias a todas por dejar sus colaboraciones en el blog!!!

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  7. Como siempre, no puedo estar más de acuerdo, Ile. Yo también he sido mujer trabajadora desde esa edad. Encantada de haber vivido en una época y en un lugar que me lo ha permitido. No quisiera que se interpretara que lo que creo que sea un error es que la mujer haya conquistado esos espacios. Como tú dices era NECESARIO, OBLIGATORIO diría yo, y tremendamente POSITIVO para todos en conjunto... lo que yo creo que es un error es que haya sido a costa de condenar la tarea que supone llevar un hogar para delante. Ha llegado un momento en que todas queremos ser profesionales, nadie quiere ser ama de casa. Ni siquiera a tiempo parcial. Ni siquiera durante un periodo puntual (cuidado de un recién nacido, cuidado de un padre enfermo). Como si eso fuera algo degradante.

    Lo gracioso es que hemos aceptado salir al mundo laboral en las mismas condiciones que los hombres, haciendo sus mismas jornadas, pero oh, sorpresa... al llegar a casa está todo por hacer. La famosa doble jornada. Para descubrir que además de trabajar fuera, hay que seguir haciendo lo de dentro. En muchos casos aún sin la ayuda del compañero. Más asco aún le cogemos a la casa. El resultado es que al final, no es tan raro ya que en una casa normal y corriente (no de ricos)haya una ayudante doméstica. Al final, las cosas hay que hacerlas. Unos u otros, pero hay que hacerlas.

    A eso era a lo que me refería, Ileana. Para mí, y puedo estar en error porque es una opinión personal, el cuidado de una casa, el mínimo de limpieza y organización, y el cuidado y la alimentación de los hijos, debería recaer sobre la pareja cuando aún son sólo dos, sobre los padres cuando los hijos son pequeños y sobre todos cuando estos son mayores. Obviamente, pienso que la solución pasa por lo que tú dices: trabajar menos, garantías sociales de permisos en condiciones, jornadas laborales compatibles con la vida... pero hasta que llegue eso, si nadie queremos renunciar a un poco de nuestra vida fuera de casa, al final lo pagará siempre el más débil.

    Desde luego, el gusto por el cuidado del hogar (todo lo que acontece de puertas para adentro de nuestra casa, no sólo limpiar, fregar y hacer la colada) NO DEBERÍA SER EXCLUSIVAMENTE FEMENINO. Si a un hombre le gusta que su casa esté limpia, debería coger un mocho a menudo, y si le gusta comer bien, y que sus hijos estén bien alimentados, debería preocuparse también por cocinar y seleccionar buenos alimentos para ellos. La sensación que yo tengo es que como, en general, ellos siguen sin hacerlo, en gran medida en nombre de locansadosqueestanporquetrabajan8horasaldía, pues nosotras, que estamos igual de cansadas después de la misma jornada, llegamos a aborrecer tan importantes tareas. No por la tarea en sí, si no porque TODA LA VIDA hemos tenido que hacerlo solas, sin ninguna ayuda y sin ningún agradecimiento. Y muchas,no digo todas, hemos pensado que al conquistar el mundo de fuera estaríamos menos 'esclavizadas' dentro, tendríamos las 'ventajas' de los hombres... menudo espejismo...

    ¿Sabes que pienso yo? :) que el camino hacia una sociedad más equilibrada y más justa empieza por lo que acontece justo en casa. Hasta que hombres y mujeres no nos demos cuenta de la importancia que tiene COMPARTIR TODAS LAS TAREAS DE LA VIDA, se va a conseguir muy poco. A quien tiene la sartén por el mango, quienes mejor viven, aún no están muy dispuestos a propiciar ese cambio...

    Un beso enorme, y perdona que me haya extendido tanto!

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  8. Caro, lo que agradezco que os extendáis!!! jejeje... Tu aportación me parece valiosísima.

    Absolutamente de acuerdo contigo, tu análisis me parece muy importante.

    El mundo DOMÉSTICO TOTALMENTE DESPRESTIGIADO.

    Lo describe un poco también el profesor Pinto en el magnífico artículo que reproduje en el post de los hombres.

    Y ABORRECER EL HOGAR, ES ABORRECER LA FAMILIA. No se hace familia en la calle. Las madres y padres salimos todos a la calle, a trabajar e incluso a estar con nuestros hijos. Incluso hay muchísimos padres que recogen a sus hijos en la guardería y se van directamente con ellos a la calle, hasta las 8 o las 9 de la noche. A casa solo se va a comer y a dormir.

    Hay un desprestigio total de estar en casa, de hacer labores domésticas, de compartir espacio y tiempo dentro de casa... incluso de no hacer nada...

    La mayoría de las labores domésticas las hacen las máquinas, o como tú bien dices, una empleada. Y ni aún así, queremos estar en casa. Parece que en casa solo se puedes hacer trabajos "pringados" o ver televisión, cada uno en su cuarto.

    Es la muerte del HOGAR, de lo íntimo, de lo privado, en favor únicamente de la vida pública. Todo el día en el escaparate.

    Me parece un hilo muy interesante este.

    Un abrazo a todas!!!

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  9. Hola. El blog me parece magnífico y comparto mucho de lo que escribes.
    Entre mis autores de referencia están Reich, Miller y Casilda.
    Sin embargo, me apena encontrar tan recomendado a un pediatra que defiende algo tan destructivo para la simbiosis como las vacunas.
    Un abrazo
    J

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    Respuestas
    1. Hola, Jesús.
      Gracias por pasar por aquí y por tu comentario.
      Carlos González es sin dudas uno de los autores más vendidos en castellano sobre crianza respetuosa, y tiene un muy buen manual sobre lactancia.
      Sobre las vacunas, podemos estar de acuerdo o no, pero eso no quita lo demás.
      Podemos coger de cada autor lo que nos sirva, y desechar lo que no nos guste, yo hace tiempo que ya no estoy 100% de acuerdo con nadie ;-)
      Un abrazo.

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    2. Hola, Ileana.
      Mi pega tiene que ver sobre todo con la coherencia.
      Un abrazo
      J

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